de Ñaque editora (http://www.naque.es/en-estado-de-espera), os presento este artículo referido a mi drama femenino.
Al principio, mi idea era hacer un repaso de lo que había dado de si este primer año de vida. Pero, al ver lo que ha sucedido en estos últimos días en nuestra sociedad mi idea inicial ha cambiado un poco.
Para los que no lo sepáis, "En estado de espera" trata sobre una sociedad futura en la que las mujeres que se han quedado embarazadas sin permiso del gobierno, se ven obligadas a parir a su hijo que pasa a ser propiedad del estado. El aborto no existe para ellas, tampoco la decisión sobre su estado. El poder del Gobierno las mantiene en una institución médica donde se las cuida con brutalidad hasta que dan a luz.
A pesar de lo que pueda parecer con esta pequeña sinopsis, no es mi intención juzgar la causa del aborto. Para mi era el medio para no poner en relieve un tema que considero más importante: el abuso de poder por parte de un gobierno despótico. Un gobierno que se toma la libertad de decidir por sus ciudadanos lo que está bien o mal, hasta en temas tan personales como puede ser el tener un hijo.
Y me resulta muy curioso, y alarmante, que en este país y en esta Europa, nos acercamos con paso lento pero firme a eso que describo en la obra. Usando como justificación la crisis económica, nos están quitando uno a uno derechos sociales, laborales y morales que son personales e intransferibles de cada individuo.
"En estado de espera" no es teatro político. Es un drama social extremo, que quiere remover conciencias, tocar fibras y hacer pensar a la gente.
Y hoy en día, en esta situación en la que nos van quitando paso a paso nuestra libertad, creo que es indispensable pensar. Porque si pensamos, podemos llegar a ver lo que nos están haciendo, y podemos luchar contra ello.
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